sábado, 26 de septiembre de 2020

El poder de la imagen. Más que una hermosa sonrisa

 Manuel Velásquez nos ofrece unas recomendaciones básicas para mejorar nuestra imagen


Por: Manuel Velásquez | Fuente: Yoinfluyo.com



¿Apoco no es desagradable hablar con alguien que tiene mal aliento? ¿No sabes qué hacer cuando tienes que hacerlo? Inclusive, si vas en el metro o en un lugar con mucha gente, puede resultar terriblemente incómodo. Lo peor, es que algunas personas no se dan cuenta de su problema y si alguien se los señala, lo pueden tomar mal y causar un conflicto.

Pero todo esto sería innecesario, si tenemos una buena higiene bucal. Aquí daremos unos consejos prácticos para cuidar de tus dientes y tu aliento, pero también para tu imagen.


Lo primero para tener un buen aseo bucal, es lavarse los dientes. Punto sencillo y básico, que si bien, a veces nos puede resultar un poco pesado por cuestiones laborales o de llegar tarde a casa, es necesario que lo hagamos. Para que el trabajo no interfiera con este hábito, es bueno llevar un cepillo de dientes en la mochila o bolsa, ya que no ocupa mucho espacio y sí nos va a ayudar bastante.

Otro de los grandes aliados a la hora de tener una buena higiene bucal, es el enjuague. Ahora, ya hay una gran variedad de presentaciones. Hay para la noche, para el día, en distintos sabores, sin alcohol, con alcohol, especiales para la gingivitis (enfermedad de las encías), especiales para un aliento fresco, etcétera. El chiste, es saber cuál se adecua más a las necesidades de uno, y conforme a eso, ocuparlo.

También tenemos al hilo dental, que si bien ya no es tan usado, sigue siendo importante para la higiene. Y es que aunque los cepillos se han hecho mucho mejor y con mejores diseños, el hilo llega a donde las cerdas y el enjuague no, removiendo partículas de comida entre los dientes. A veces, un pedazo de carne, puede provocar muy mal aliento.

Algo que probablemente poca gente sepa, es que tener caries puede generar mal aliento. Por lo que si notamos que tenemos mal sabor de boca después de hacernos nuestro aseo bucal, es conveniente acudir a un dentista a que nos haga una revisión general.

Pero nuestros hábitos bucales deben ir más allá de limpiarnos bien los dientes. Es necesario saber puntos básicos de educación, para que una buena sonrisa, esté acompañada de una buena imagen integral.

Es básico comer con la boca cerrada. Puede resultar también terriblemente desagradable, para algunas personas, ver cómo alguien degusta con la boca abierta. Más si se está en un ambiente formal o de trabajo. Hablar con la boca llena se debe también evitar o bien hacerlo de la forma más discreta posible.

El tema del chicle es delicado, y es que mascarlo puede resultar desestresante, lo que en ciertas situaciones nos puede ayudar. Sin embargo, también genera mucha salivación, haciendo que nuestro estómago crea que estamos comiendo sin que éste reciba alimento alguno, por lo que los jugos gástricos se incrementan y pueden causar a la larga gastritis. Pero también hay que saber cuando mascarlo, y es que estando en una junta, puede no resultar lo más conveniente, ya que demuestra indiferencia y falta de atención.

Si el mal olor persiste pese al habitual aseo bucal puede tener alguna enfermedad por lo que es indispensable que acuda al médico.

sábado, 19 de septiembre de 2020

La ley del talión, la venganza y el perdón

 Meditación. La ley del amor va más lejos que la ley del talión



Por: P: Enrique Cases | Fuente: Catholic.net



"Habéis oído que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente. Pero yo os digo: No repliquéis al malvado; por el contrario, si alguien te golpea en la mejilla derecha, preséntale también la otra. Al que quiera entrar en pleito contigo para quitarte la túnica, déjale también la capa. A quien te fuerce a andar una milla, ve con él dos. A quien te pida, dale; y no rehuyas al que quiera de ti algo prestado" (Mt)

La ley del talión era un avance ético en momentos de brutalidad, cuando la venganza era mayor que la ofensa recibida. La cadena de venganzas era creciente, y fuente de dolores casi imposible de curar. Jesús va de nuevo a la raíz: el perdón ante la ofensa real recibida. Ante la violencia responder con la caridad, no con más violencia.

Es frecuente ver que las guerras generan odios y repiten, al pasar el tiempo, nuevos horrores. El perdón permite comenzar de nuevo. Pero con un perdón que salga de dentro, que sea real.

Jesús utiliza imágenes de la vida cotidiana con abusos de menos categoría, para que si en estas cuestiones se cede, conscientes de la nueva justicia que se está viviendo, cuando lleguen los problemas graves se pueda acceder a un orden superior. La ley del amor va más lejos que la ley del talión.

 

sábado, 12 de septiembre de 2020

5 malos hábitos que pueden llevar a la infidelidad

 Estas acciones pueden crear en el matrimonio un patrón de pensamiento en el cual la probabilidad de adulterio aumenta


Por: Philip Kosloski | Fuente: PhilipKosloski.com // PildorasdeFe.net



Recientemente me senté en mi oficina con un joven esposo y comenzó a contarme una historia acerca de cómo su esposa lo había descubierto teniendo un inapropiado intercambio de mensajes de textos con contenido sexual con una compañera de trabajo. 

Su esposa había sospechado que algo estaba mal, que podía haber una infidelidad, porque inconscientemente él se había alejado de ella de forma emocional y física, mientras le daba más y más espacio en sus pensamientos a esta otra mujer.

Hasta ese momento, no habían cruzado la línea del contacto físico o sexual, únicamente la parte emocional, y aun así, le hizo mucho daño a su matrimonio. Como muchas parejas, se encontraron en una posición en la que jamás se imaginaron y ahora estaban tratando de comenzar a reconstruir la confianza y restaurar su relación.

Mi conversación con él me llevo a pensar en aquellos pequeños errores que frecuentemente cometemos y nos pueden llevar a caer en el adulterio. Así que a continuación voy a listar cinco señales que he visto frecuentemente.

Estas no están específicamente relacionadas a una relación inapropiada con alguien que pueda llevar al adulterio, PERO estas acciones pueden crear en el matrimonio un modo de pensamiento donde el adulterio tiene mayor probabilidad de ocurrir.

Comparto entonces los 5 malos hábitos que nos pueden llevar a la infidelidad (sin un orden en particular):


1.- Criticar a tu cónyuge en público, en privado o en línea.

El criticar, quejarse o constantemente corregir a su cónyuge puede hacer que ambos sean más vulnerables a una aventura. Cuando tú miras a tu esposo(a) con un ojo crítico, estás más propenso(a) a poner tus ojos en alguien más y tu cónyuge está más propenso a ser atraído por alguien que le dé un cumplido en lugar de una crítica. Si hay un clima de crítica en tu matrimonio, toma acción inmediata para cambiar esta situación.

2.- Falta de afecto físico

Si tú y tu pareja no se están abrazando, besando, agarrando de la mano, etc. esta es una señal mayúscula. La intimidad sexual frecuente es obviamente importante también, pero estos pequeños actos de contacto físico diario son importantes para la conexión física y emocional que mantiene juntos a marido y mujer. Si en tu matrimonio está faltando esto, comienza ya a tener estos contactos físicos. Si tu cónyuge no recibe con calidez tus acercamientos, deben conversar sobre las razones por las que hay una falta de conexión.

3.- Rodearte de amigos que no conozcan (o no les guste) tu cónyuge.

Estoy convencido de que uno de los grandes factores que llevan a las personas a tener una aventura son los amigos de los que se rodean. Esto te puede sonar sorprendente, pero lo he visto pasar muchas veces. En la mayoría de los casos (no todos) de adulterio, el cónyuge que ha tenido una aventura también ha estado pasando tiempo con amigos y compañeros de trabajo que no contribuyen a la fidelidad matrimonial. Rodéate de amigos que fortalezcan tu carácter y aléjate de aquellos que pueden comprometer tus principios.

4.- Creer que tú tienes la razón todo el tiempo.

Cuando empiezas a faltarle el respeto a tu cónyuge al no considerar sus puntos de vista, estás abriendo la puerta a la infidelidad. Muestren respeto mutuo todo el tiempo. El respeto y la consideración no solo son excelentes herramientas para prevenir el adulterio, son vitales para sanar cada parte de tu matrimonio.

5.- Tener secretos para con tu cónyuge.

El sigilo es el enemigo de la intimidad. ¡El momento en el que empiezas a borrar tus mensajes de texto, esconder cosas o hacer cualquier cosa que esperas que tu cónyuge no se dé cuenta, realmente estas cruzando una línea de respeto! Si quieres que tu matrimonio no esté en riesgo y este protegido del adulterio, asegúrate de que esté “Libre de Secretos”. Nunca guardes secretos y nunca mientas a tu cónyuge. La transparencia y honestidad total son la única forma en la que un matrimonio puede funcionar.